El Rugby apareció en mi vida por volta de los 10 años, a convite de un amigo. Experimenté e nunca más largué. Primero como jugador, después como entrenador pero siempre como adepto.

 

En 2009, fue invitado a dar apoyo al entrenador de los Sub-10 que estaba sólo y precisaba de un adjunto. A pesar de tener una vida profesional agitada, he sentido que cuando me inicié en esta modalidad, se no hovera entrenadores que se sacrificaran para que los jóvenes pudiesen entrenar, aprender e jugar, yo nunca tenería la oportunidad de conocer e apasionarme por esta modalidad.

 

He sentido que estaba en falta para con un deporte que tanto me dio...

 

Fue el entrenador de los Su-12 del Clube de Rugby S. Miguel, y ya he completado el cursillo de primer grado para entrenadores.

 

Hace algunos años, he cumplido un sueño hace mucho tiempo adiado, volver a entrenar y jugar al más alto nivel. Me he inscrito en el equipo sénior, entrené, entrené y entrené... Tenido sido recompensado con 12' en juego oficial contra el equipo de Técnico B. La época de C. R. S. Miguel estuve muy cerca de la perfección, que nos hemos sagrado vice campeones de la 2ª División y subido hasta la primera en esta época. 

 

Más un objetivo cumplido y la muestra que cuando nos esforzamos y nos dedicamos, el cielo es el límite.

 

El Rugby es un deporte que nos concede disciplina, ayúdanos a ganar más concentración, nos ensena a trabajar en equipo y a saber depender de ella... Rugby es una escuela para la vida.

 

Cuando nos pasan la pelota, por veces, dispongas de muy poco tiempo para tomar una decisión. El Rugby ensénanos a tomar decisiones rápidamente y a luchar por ellas, en cuanto tuvieres camino a conquistar. También te ensena a cambiar de táctica, si la decisión inicial no se revele como la mejor y, por fin, a pasar la pelota a un colega mejor posicionado para que este siga para el ensayo. Trabajo en equipo, poder de decisión, fuerza de querer, espirito de sacrificio y humildad son principios que he aprendido y que los mantengo hasta hoy.